Los suicidas

11 feb 2019

Hace un par de semanas me enteré de que una conocida se suicidó.
Nevermind, no era mi amiga.
Nunca se suicidó ningún amigo mío.
Se suicidó el mejor amigo de unos amigos.
O eso dicen.

Pasó hace más de 10 años, cerca de la casa a la que me mudaría un par de meses después.
Este tal Lagarto estaba en esta casa, Bartenes y Pena. Salió a dar una vuelta con otro pibe.
Estaban escabiando fuerte, como era menester entre nosotros. Vino suelto o alcohol de farmacia con jugo.
Llegaron hasta las vías, que estaban a un par de cuadras. Justo venía el tren.
Al Lagarto se le ocurrió apostar con el otro pibe a ver cuál de los dos se quedaba más rato parado en la vía. Ganó la apuesta.
O el otro le empujó, también dicen.
El otro era un pendejito punk. Haciendo memoria, no tendría más de 16-17 años.

Mis amigos lloraron por el Lagarto días. Yo no; no era mi amigo y tampoco me caía demasiado bien. 
Creo que solo lloré una muerte en mi vida. La Parca me hace guiños, pero no se acerca.
Mis amigos viven pensando en matarse, pero no lo hacen. Hacen arte y sobreviven con unos pocos mangos. 
Yo vivo pensando en matarme. Destruyo mi vida y la empiezo en otro lado. Hago unos pocos mangos y sobrevivo a fuerza de arte.

Algunas personas hacen bien en matarse.

3 opiniones, saludos, etc :

Guillermo Altayrac dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Guillermo Altayrac dijo...

Ey. Textazo.

Txus dijo...

Gracias!! Creo que debería estar en recuerdosdelinfierno, pero meh..